Asus fue uno de los primeros fabricantes en incorporar materiales “ecológicos” en sus ordenadores portátiles, con el Eco Book, que combinaba el bambú con el resto de materiales en su carcasa.
El Fujitsu WoodShell va incluso más allá, ofreciendo toda la carcasa en madera de cedro, en un modelo que se está mostrando durante estos días en el Salón Internacional del Mueble, que se celebra en Milán. De todos modos, estos modelos suelen ser simplemente prototipos que difícilmente veremos comercializados, pero que sirven como base de investigación para el uso de nuevos materiales.
Ahora, la duda queda en si el uso de materiales como la madera o el bambú son realmente más ecológicos que otros como el plástico o el aluminio. Particularmente, tengo mis serias dudas, aunque seguramente el proceso de reciclado de estos produzca menos residuos que los portátiles que usamos en la actualidad. Un tema que seguro que toma mucha importancia durante los próximos años.
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